El 30 de mayo se conmemora el Día Nacional de la Donación de Órganos y Tejidos. Esta fecha se eligió porque fue el día en que nació el hijo de la primer paciente trasplantada de hígado en el Hospital Dr. Cosme Argerich de nuestro país.
Este hecho muestra como es posible vivir y dar vida después de un trasplante. Actualmente, miles de personas están esperando un órgano o tejido para vivir o mejorar su calidad de vida.
Esta fecha se nos presenta, a todos los ciudadanos, como una oportunidad para estimular la conciencia sobre la donación de órganos para trasplante y reflexionar acerca de como mejorar los problemas de salud de la población.
El trasplante de órganos es una práctica habitual en el Sistema de Salud argentino: en 2015 cada 5 horas un paciente accedió a un trasplante de órganos.
El INCUCAI, como el organismo encargado de impulsar, normatizar, coordinar y fiscalizar las actividades de donación y trasplante de órganos, tejidos y células en nuestro país; realiza cada año diversas actividades para promover a la comunidad a manifestarse y expresar su voluntad de donar órganos.
Durante los últimos años, en Argentina, se registraron índices históricos de donantes. La actividad de trasplante en 2015, seguin el INCUCAI, fué la siguiente:
La concreción del trasplante es posible gracias a la participación de la sociedad representada en el acto de donar, a la intervención de los establecimientos hospitalarios, de los organismos pertenecientes al sistema sanitario argentino, y a a la difusión desde los distintos medios de comunicación.
Un donante puede dar vida, prolongar la vida y mejorar la calidad de vida de muchas personas que esperan en esa lista casi interminable. Donar es consolidar la vida en todos sus aspectos.